miércoles, 21 de noviembre de 2007

Monje libro

...Es que la tecnología avanza que es una barbaridad

lunes, 8 de octubre de 2007

Anarquía.

En mi opinión el arte es una forma de anarquía, y el teatro es una forma de arte. El arte sólo es anarquía, en yuxtaposición con la sociedad organizada. Es una anarquía beneficiosa; debe serlo, y si es verdadero arte, lo es. Es beneficiosa si construye algo que faltaba, y lo que construye puede ser la crítica de lo que existe.
Tennessee Williams

miércoles, 11 de julio de 2007

martes, 12 de junio de 2007

Encuentros en la casa de empeño.


Se rumoreó y se desmintió (ya se sabe, el desmentido suele ser la antesala de la noticia, salvo en España, que es noticia en sí mismo) y aún no está muy claro lo que va a suceder con el patrimonio histórico artístico del Partido Comunista Francés. La famosa Gioconda con bigote de Duchamp parecía que iba a cambiar de manos, y los dibujos donados por Picasso también corrían el peligro de dejar su espacio libertario y pasar a manos burguesas.

Por ahora la cosa queda ahí, con un partido en quiebra para gozo de la derecha y de la llamada socialdemocracia, que casi veinte años después de la caída del muro sigue sacudiéndose el complejo de hermano pequeño torpón o heredero arribista que no suelta la mejor parte del pastel.

Quizá la verdadera crisis, como el sueño genuino comenzó en Rusia hace 90 años; en otoño, una época en la que sólo podrían florecer las utopías. Cuando los propios comunistas dirigidos por Stalin se convirtieron en una caricatura grotesca y siniestra a costa de los que realmente creían que el sueño estaba al alcance de la mano.

En Occidente, especialista en mirar sin ver, todo eso se obvió y se mantuvieron consignas prostituídas que ni siquiera se tambalearon hasta que los tanques comenzaron a tomar Praga o Budapest, a veces ni eso.

Lo más trágico es que, por encima del arte en forma de cuadros o edificios, el comunismo perdió los sueños, o lo que es peor, con demasiada frecuencia los convirtió en pesadillas que ni de lejos vislumbraron lo que podía haber sido y no fue.

jueves, 7 de junio de 2007

Espacios perdidos.

De 2666:

Las únicas salas de cine que cumplían una función, dijo Charly Cruz, eran las viejas, ¿las recuerdas?, esos teatros enormes que cuando se apagaban las luces a uno se le encogía el corazón. Esas salas estaban bien, eran los verdaderos cines, lo más parecido a una iglesia, techos altísimos, grandes cortinas rojo granate, columnas, pasillos con viejas alfombras desgastadas, palcos, localidades de platea y galería o gallinero, edificios construidos en los años en los que el cine todavía era una experiencia religiosa, cotidiana y sin embargo religiosa, y que poco a poco fueron demolidos para edificar bancos o supermercados o multicines. Hoy, le dijo Charly Cruz, apenas sobreviven unos pocos, hoy todos los cines son multicines, con pantallas pequeñas, espacio reducido, butacas comodísimas. En el espacio de una vieja sala de verdad caben siete salas reducidas de un multicine. O diez. O quince, depende. Y ya no hay experiencia abismal, no existe el vértigo antes del inicio de una película, ya nadie se siente solo en el interior de un multicine
(Roberto Bolaño)

domingo, 6 de mayo de 2007

Catacresis.

Según la RAE:
Catacresis: 1. f. Ret. Tropo que consiste en dar a una palabra sentido traslaticio para designar algo que carece de nombre especial; p. ej., la hoja de la espada; una hoja de papel.

En Los detectives salvajes, del genial Roberto Bolaño aparece otra definición, que es con la que nos quedamos:
Catacresis: Es una metáfora que ha entrado en el uso normal y cotidiano del lenguaje y que ya no se percibe como tal. Ejemplos: ojo de aguja, cuello de botella.

miércoles, 11 de abril de 2007

Kirchner.


"En el famoso Autorretrato como soldado (1915), el testimonio más excitante de su crisis psíquica, Kirchner se retrató en su estudio berlinés durante un permiso. La mujer desnuda encarna al mismo tiempo a su amante y al arte. El pintor posa con todos los atributos asociados a su papel de soldado, pero con la mano derecha cortada. La guerra le robará el instrumento más importante para un artista: tal era su miedo maníaco. La mirada perdida refleja su desesperación. El uniforme parece una camisa de fuerza." (Norbert Wolf)

jueves, 15 de marzo de 2007

Rodchenko



Si viviese hoy en lugar de haber muerto hace cincuenta años, probablemente a Aleksander Rodchenko (San Petersburgo 1891) podría vérsele en cualquier parte llevándose trozos de realidad con una de estas cámaras que todo lo pueden por obra y gracia de la tecnología digital. Después emplearía un programa de ordenador, o sus propias manos para hacer los fotomontajes que le dieron fama.

Comenzó en la fotografía a los 33 años y no la abandonará hasta su muerte. Irracionalmente enamorado de los racionales ciencia y progreso, como todos los artistas rusos de la primera etapa de la Revolución, será apartado por el férreo tradicionalismo artístico que traerá Stalin en su siempre cerrado puño.

En sus últimas obras se dedicó al mundo del circo, quizá desengañado de lo mucho que puede cambiar el concepto progreso en una revolución.


(En la primera imagen: "Libros", anuncio publicitario de la sección de la Gosizdat (Imprenta Estatal) de Leningrado, 1924. La segunda, "Balcones," 1925)

jueves, 8 de febrero de 2007

Ángel González.

Nacido en 1922 no puede ser considerado una promesa de la poesía por dos razones, la primera es que es una realidad y la segunda es que su poesía siempre cumple.
A pesar de que su mayor resonancia en estos días terribles se debe a su amistad con Joaquín Sabina, su persona y su personalidad aparecen en sus versos con una rotundidad y frescura que no requieren ni publicistas ni congresos literarios para demostrar que, si clavamos nuestra mirada en sus poemas, manará en abundancia la belleza como única sangre necesaria para estos tiempo inciertos.
Y para muestra un botón:

INVENTARIO DE LUGARES PROPICIOS AL AMOR
Son pocos.
La primavera está muy prestigiada, pero
es mejor el verano.
Y también esas grietas que el otoño
forma al interceder con los domingos
en algunas ciudades
ya de por sí amarillas como plátanos.
El invierno elimina muchos sitios:
quicios de puertas orientadas al norte,
orillas de los ríos,
bancos públicos.Los contrafuertes exteriores
de las viejas iglesias
dejan a veces huecos
utilizables aunque caiga nieve.
Pero desengañémonos: las bajas
temperaturas y los vientos húmedos
lo dificultan todo.
Las ordenanzas, además, proscriben
la caricia ( con exenciones
para determinadas zonas epidérmicas
-sin interés alguno-
en niños, perros y otros animales)
y el «no tocar, peligro de ignominia»
puede leerse en miles de miradas.
¿Adónde huir, entonces?
Por todas partes ojos bizcos,
córneas torturadas,
implacables pupilas,
retinas reticentes,
vigilan, desconfían, amenazan.
Queda quizá el recurso de andar solo,
de vaciar el alma de ternura
y llenarla de hastío e indiferencia,
en este tiempo hostil, propicio al odio.

viernes, 26 de enero de 2007

sábado, 20 de enero de 2007

Harún y el mar de las historias.

Roto este año, con Orhan Pamuk, el tradicional perfil del ganador del Nobel de Literatura como hombre o mujer en su ocaso vital, desde aquí solicitamos que, a la mayor brevedad posible, el galardón recaiga sobre el escritor angloindio Salman Rushdie, uno de los grandes que continúa escribiendo maravillas a pesar de todo el dramático revuelo causado por los Versos Satánicos hace casi veinte años.
Un año después de la polémica, en 1990, Rushdie publica su primer libro postVersosSatánicos, y sorprende con un relato infantil cargado de un poderoso elenco de metáforas y generando unos lugares inventados sorprendentemente posibles y cercanos.
Harún y el mar de las historias, en sus menos de doscientas páginas, despliega todo un mundo de matices y de personajes simplemente geniales bajo una dinámica de conflicto entre el silencio y la palabra, las sombras y la luz.
El niño protagonista buscará por todos los medios que su padre, narrador apasionado y torrencial en una sociedad triste que ha perdido la fuente de las historias, recupere la capacidad de contar. Eso le llevará al lugar en el que las historias se generan y en el que están amenazadas por una mortal contaminación de silencio.
La confrontación entre ambas dimensiones, de carácter épico pero también cotidiano, será toda una aventura.
Cómo no ver paralelismos con la vida de Rushdie, amenazada por haber usado la palabra.
En fin, imprescindible.
P.S. Señores de la Academia Sueca, ya están tardando.

domingo, 14 de enero de 2007

Los detectives salvajes.

Roberto Bolaño es de los escasos autores a los que la literatura debe más que otorga a cambio. Muerto en 2003 con 50 años y una primavera, se consagró como escritor en los años 90, tras largas décadas de marginación intelectual y vital, de permanecer en una derrota continua apenas maquillada por el éxito y reconocimiento finales, con sabor póstumo.
Los detectives salvajes es una ingente obra sobre las continuas derrotas, desapariciones, frustraciones, espejismos, ilusiones que son necesarias para vivir pero que están huecas de sentido y carecen de punto de llegada.
Novela que mezcla el diario, la novela policíaca, el libro de viajes, la crónica, los testimonios de una oceánica masa de personajes secundarios, se revela como una de las grandes creaciones de finales del siglo XX. Las referencias serán dos poetas marginales de México DF, Ulises Lima y Arturo Belano, que se embarcarán en una búsqueda imposible para ser a la vez buscados.
En un eje cronológico de 20 años, recordando al tango, que nadie espera nada más que rastros borrados y recuerdos borrosos. Y la mejor literatura para contarlos.
Valga una frase:
"Yo también, llegado el momento, dejé de escribir y de leer poesía. A partir de entonces mi vida discurrió por los cauces más grises que uno pueda imaginarse".

viernes, 5 de enero de 2007

Nieve.

El silencio de la nieve, pensaba el hombre que estaba sentado inmediatamente detrás del conductor del autobús. Si hubiera sido el principio de un poema, habría llamado a lo que sentía en su interior el silencio de la nieve.
Orhan Pamuk. Nieve (2001).

A una perdida ciudad permanentemente nevada de la península de Anatolia, viejo escenario de su infancia, regresa el protagonista por motivos en principio periodísticos que acabarán por sumergirlo en la cruda realidad de la Turquía contemporánea, marcada por el enfrentamiento entre opuestos cada vez más irreconciliables como laicismo/ fanatismo religioso, vida/muerte o pasado/futuro.
Esta realidad tensa también afectará al protagonista, un escritor exiliado en Alemania que encarna a la perfección la asfixia por estar a caballo entre dos mundos siendo extranjero en ambos. En su regreso encontrará en el reencuentro con un antiguo amor una posibilidad de recuperar el equilibrio perdido y encontrarse, por fin, en casa.
Vidas individuales y sociedades enteras al borde de un abismo en un maravilloso (y triste) marco salido del bolígrafo, pluma o teclado de Orhan Pamuk, a quien no es difícil de reconocer en el escritor portagonista.
El título alude a lo único estable, la único que no puede ser estirado hasta la rotura por realidades polarizadas y enfrentadas. Aunque tampoco solucione demasiado.

jueves, 4 de enero de 2007

Pórtico.

Comienza esta andadura bajo el techo de rinran. Aquí nos dedicaremos a las letras, mayúsculas o minúsculas, presentes o ausentes, recordadas u olvidadas, pronunciables o inefables, distantes o cercanas. Y también a la imagen, tratando a ambas de una manera democrática y superadora del "vale más una que mil de las otras."
Empecemos, pues.